lunes, 17 de mayo de 2010

Carta de Agradecimiento a la A.C.U.


Madrid, 11 de mayo de 2010.

Mis queridísimos agrupados:

No es fácil condensar en pocas palabras lo vivido en mi corto pero intenso viaje de despedida a mi tío Amando. Pero sin lugar a duda, la primera de estas palabras debe ser un ENORME GRACIAS.

Gracias por el último adiós que le preparasteis, no pudisteis hacerlo mejor: el P. Nelson, Pablo Carreño, Jesús León, Mariano, Joel, los presidentes de las distintas ciudades, …. y todas y cada una de las personas que estuvisteis colaborando. Hasta el más mínimo detalle, todo estuvo PERFECTO. Desde que llegué a la ACU fue super-emocionante: la organización metódica, la multitudinaria Eucaristía del domingo en “su” bahía con la espléndida homilía pronunciada por el P. Nelsón, el velatorio por los agrupados durante todo el fin de semana, el entierro en la Iglesia del Gesu, ... Cada uno de los asistentes y los que participaron no pudieron hacerlo mejor. Mis palabras de agradecimiento se quedaron cortas para todo aquello que vivimos, por el maravilloso trato que tuvisteis, por el mimo y el detalle con el que estuvo preparado y por el cariño que le rodeó y nos rodeó hasta su último instante. ¡Qué orgulloso os contemplará desde el cielo a cada uno de vosotros! Sus amigos del alma, su familia de la Agrupación, donde quiso vivir, donde quiso morir…

Y para “rematar”, vuestros continuos gestos de amabilidad, José Montero y su equipo hicieron posible lo que fue un verdadero regalo: poder seguir el funeral por video-conferencia. La familia Llorente unida en su León natal siguió la celebración a través de una pantalla gigante. Así su hermano Liborio pudo unirse al último adiós y orgulloso repetía “¡Pero qué entierro! ¡Cómo le quieren! ¡No ha podido ser más bonito!...” Entre profunda tristeza, el “estar allí desde su casa” le proporcionó un consuelo que nadie había podido darle. También se conectaron sobrinos desde Valladolid, Valencia, Murcia, Teruel, Madrid, Santander, Galicia, Pamplona, Vizcaya y hasta desde Inglaterra, Lituania y China donde se encuentran varios de ellos.

¡Qué grandeza! Vuestro esfuerzo y sobre todo vuestro cariño y generosidad nos han dejado eternamente agradecidos.

Estoy segura de que él desde arriba nos seguirá dando fuerza para vivir unidos la amistad y la fe, tal y como él nos enseñó.

Recibid, en nombre propio y en el de la familia Llorente, todo el cariño y agradecimiento que os merecéis.

Un abrazo,


Puri Llorente

lunes, 10 de mayo de 2010

Homilía del Cardenal Sean en la misa del Gesu


"Arzobispo Favalora, Padre Solís, Sacerdotes, Religiosos, Padre Provincial. Le agradezco mucho al Padre Suárez por permitirme dirigirles la palabra.
Primeramente quisiera expresar mis sentimientos de solidaridad y de pésame más sentido a los familiares del Padre Llorente, a sus hermanos Jesuitas y a todos que forman parte de nuestra gran familia de la Agrupación Católica. Hoy al despedirnos de nuestro patriarca nos sentimos un poco huérfanos.
Cuando yo digo a mis hermanos obispos que tengo trescientos Jesuitas en mi archidiócesis, ni un Santo Padre puede jactarse de eso; algunos me hacen muecas otros me dan un beso. Pero yo creo que es envidia.
Mi papá invocó en sus hijos un gran amor a los hijos de San Ignacio. El quería que yo fuera Jesuita. Los hermanos Jesuitas tienen 36 cráteres en la luna nombrados por sus hijos y los Capuchinos sólo una taza de café. Por lo menos papá soy Agrupado.
El mismo se da de gente leía Selecciones y en todos los números había un artículo que se titulaba “La persona mas inolvidable que he conocido en mi vida.” Confieso que para mí el Padre Llorente sería un candidato.
Hace varias semanas yo sentía un gran deseo de ver al Padre Llorente. Tal vez porque nosotros algunas veces somos un poco supersticiosos y me alegré cuando tenía que pasar por Miami rumbo a Haití. Javier Suárez me dijo que el Padre estaba dando una tanda de retiros y por eso sería fácil pasar por la Agrupación a saludarlo. Pero cuando llegamos, Don Manolo, fiel escudero y mayordomo del padre Llorente nos paró en seco. Nos dijo: “el padre está en su recámara y no se permite llamar sino en caso de ladrones o fuego"… así me quedé con las ganas. Pero hace dos semanas tenía que hacer otro viaje a Haití y avisamos que quería visitar al Padre Llorente; que ya habían ampliado la lista de ladrones y fuego para incluir cardenales. Tuvimos la dicha de tener la Santa Misa con él y una gran visita. Una gracia muy especial; no sabía que iba a ser la última vez en esta [vida].
La noticia de su muerte me impactó mucho. Recibí como treinta llamadas y un sin número de correspondencia electrónica por si acaso no había sabido. Su muerte me hizo recordar cómo durante la persecución de la Iglesia de Inglaterra, cada vez que mataban a un sacerdote de Inglaterra en Roma en el Colegio Inglés repicaban, no doblaban las campanas. Y se reunían todos los seminaristas y padres en la capilla para cantar el “Te Deo”; un himno de júbilo y de acción de gracias. Estoy muy afligido por la muerte del Padre Llorente pero también tan agradecido por su vida, su testimonio y por su amistad.
Cuando el P. Llorente celebró sus bodas de oro me pidió que predicara. Y yo bromeaba con él citando a Unamuno que tiene una comparación genial de San Ignacio con Don Quijote. Para mí el Padre Llorente encarnaba el ideal de San Ignacio. Su pasión, su idealismo su deseo de hacer presente el reto de Cristo. Cuando San Ignacio despidió a los suyos en Roma les retó: Id y pegad fuego al mundo entero. Amando Llorente cumplió a cabalidad esa misión.
Yo empecé a frecuentar la ACU hace 45 años cuando era seminarista en Washington. Desde el primer momento que conocí al Padre Llorente me inspiró. Seminaristas necesitan ver a sacerdotes como él para tener modelos de como ser íconos del Buen Pastor.
En mis años como director del Centro Católico Hispano estaba rodeado de agrupados, de esposas de agrupados e hijos de agrupados. El Padre Llorente, el segundo fundador de la ACU formaba a toda esa gente con una espiritualidad ignaciana, con una sana doctrina católica y con una gran pasión para servir. Mi ministerio se beneficiaba por la tarea del Padre Llorente. Unos siembran otros cosechan. Yo cosechaba las maravillas que el Padre Llorente sembraba.
Los hombres se definen por sus amores. En el caso del Padre Llorente son muy obvios: su amor a Cristo, su amor a la Iglesia, a la Compañía de Jesús, su amor a la ACU, a Cuba y a todos ustedes.
Le encomendamos al cuidado de la Santísima Virgen confiados de que algún día volveremos a gozar de su amistad.
Señor tomad y recibid este gran sacerdote.
Gracias por el regalo de su vida.
Amen".

sábado, 8 de mayo de 2010

Carta de Rafael Madan a Liborio Llorente

Foto: Amando y Liborio el día que se encontraron casualmente en Zaragoza durante la Guerra Civil Española.
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Oakton, Virginia
2-V-2010

¡Muy Liborio mío, y queridísima familia!

En estos momentos de tantísimo dolor, las palabras (hay que decir la verdad) ofrecen poco consuelo – o mejor dicho, ofrecen un medio bastante pobre para expresar lo que siente uno y el calor que desea comunicar–. Sé – y de sobra – cuánto se siente este fallecimiento allá en Villa, pueblo que tanto quiero y recuerdo con tanto cariño. ¿No fue él mismo quien agenció mi primera temporada ahí como pinche? ¿No fue ahí donde oí, de tus propios labios, la maravillosa historia de tu encuentro con él en la estación de trenes de Zaragoza en plena guerra? (¡Qué bueno que aquella película de Tarzán fue tan mala!) Y si el Señor se vale de películas aburridas para producir sus milagros, cuánto más ha podido producir con el milagro que ha sido la maravillosa vida de este hermano tuyo. Me llevas Liborio, unos cuantos años, y conociste a tu hermano, por supuesto, mucho más de lo que yo, pero fue él mi padre espiritual desde mi nacimiento y en algo comparto tu pérdida. Desde aquí puedo asegurarte que hay miles y miles que debemos nuestra santa fe – y nuestra salvación eterna – al valor, hombría, y sacerdocio de este hermano tuyo. Hoy lo enterramos, y él ha comenzado su gran encuentro familiar en el cielo. Que nos reunamos todos ahí en la mesa del Señor.

Un abrazo fortísimo,

Rafaelito

El fallecimiento de Tío Amando en los medios americanos.

A continuación ponemos enlaces con la recopilación artículos y otras referencias que Ramón Madan ha encontrado en la Web refiriéndose al fallecimiento de Tío Amando. Algunos de ellos, añaden comentarios de otras personas que son muy interesantes.

Blog del Cardenal Sean Patrick O'Malley: (está bastante abajo en la página)
http://www.cardinalseansblog.org/2010/05/07/our-youth-catechesis-symposium/

Artículo de Fr. Willie:
http://www.belenjesuit.org/Page.aspx?pid=1505

Artículo de Ana Rodríguez Soto:
http://www.newmiamiarch.org/ip.asp?op=Article_10429122018403

Casa de Retiros Juan Pablo II:
http://www.newmiamiarch.org/Atimo_s/news/PadreLlorente-ACU.pdf

Artículo de Juan-Carlos Chávez. Miami Herald.
http://www.miamiherald.com/2010/05/01/1607334/fallece-el-conocido-sacerdote.html

Artículos en el Diario Las Américas
http://www.diariolasamericas.com/news.php?nid=98549
http://www.diariolasamericas.com/news.php?nid=98604&cha=33

Revista Ecclesia Digital
http://revistaecclesia.com/content/view/17395/53/

Artículo de Manny García-Tuñón. El Nuevo Herald.
http://www.elnuevoherald.com/2010/05/03/710315/una-ausencia-que-sera-muy-dificil.html

Artículo de Alberto Muller.
http://albertomuller.net/noticias/adios-padre-llorente/

Artículo de Nino Alvarez. ACU
http://www.estovir.org/NewsandEvents/LatestNews/tabid/132/articleType/ArticleView/articleId/33/Hasta-Luego----Padre-Amando.aspx

jueves, 6 de mayo de 2010

Nuestra más profunda gratitud a todos los agrupados


La familia queremos expresar nuestra profunda gratitud a todos los agrupados que dieron su apoyo incondicional, cariño inmenso, alegría desbordante y amor a tío Amando durante toda su vida.

El sabía que contaba con un ejército de soldados en Cristo y que así su batalla en la Fe sería victoriosa.

La familia hemos vivido en su funeral en Miami todo ese AMOR con palabras mayúsculas. Tío Amando fue acompañado por sus agrupados hasta el final. Conmovedora la Guardia de Honor que lo velaba con devoción día y noche hasta que dejó su queridísima ACU. Conmovedoras las palabras emocionadas de cada uno de ellos , con qué afecto hablaban de él!, como su padre espiritual, su roca, su mejor amigo, su hermano. Ahí ya era obvio, todos éramos hermanos en Cristo!!!!. Conmovedoras las palabras llenas de emoción del Padre Nelson al despedirse ; Y el culmen llegó en la Misa celebrada en la iglesia del Jesu, donde una iglesia abarrotada de almas inspiradas por él ofrecían sus oraciones, su respeto, sus lágrimas y su gratitud por su incondicional entrega a la Agrupación. Fue increíble ver a más de cuarenta sacerdotes, muchos de ellos agrupados incluyendo a su eminencia el Cardenal de Boston , Cardenal Sean y a las monjas de la Madre Teresa de Calcuta a las que tanto quería tío Amando.

Fue una celebración preparada con todo detalle!!! Hasta consiguieron reunir a la familia de sangre a través de una retransmisión en directo vía internet, familiares en León, en Pamplona, en Valencia e incluso en China pudieron vivirlo también!! Qué sonrisa tendría tío Amando!!!

Eso era lo suyo, UNIR, unió a los agrupados en su salida del exilio, unía a la familia cada vez que nos visitaba, a todos nos unía en la FE, en su amor por nuestra Madre María, en su amor por Cristo.

En su Misa se cantó “Pescador” y sabemos que él lo estaba entonando a nuestro lado con voz fuerte y brazos extendidos!!! El querría que continuaramos su gran misión, seguir pescando almas por Cristo para poder cantar todos juntos desde el Cielo. Que así sea!!!

Beatriz (sobrina nieta)
WASHINGTON

lunes, 3 de mayo de 2010

Mis recuerdos sobre tío Amando ...

Foto: Nuestra última tarde en España con tío Amando.
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· En mi niñez yo tengo dos imágenes de él: a - Venía todos los años en agosto con una camiseta de regalo para los sobrinos, de colores chillones y tallas amplias, que se convertía en el uniforme de verano. b – Las reuniones nocturnas en la galería de tío Joaco, después de la merienda de tía Encarna, en las que ensayábamos canciones caribeñas: “Adiós, Borinquen querida”, “Qué será” o “Cuando salí de Cuba”. A medianoche volvíamos para Villafalé en burro o en yegua repasando las canciones con mi padre.

· A los trece años, en el seminario, solían leer en el comedor las aventuras de tío Segundo en Alaska. De repente la noticia empezó a ser tío Amando y su salida “pies en polvorosa” de Cuba. Estuve una semana en la Universidad de Comillas mientras él daba un curso sobre la situación religiosa y política en Cuba. Allí empecé a admirarle como orador.

· Ante un atril y un micrófono era único. En mi vida he oído miles de discursos, homilías o conferencias. Para mí él era el mejor. Estaba inundado de Dios y lo sabía decir como nadie. Su sermón era la “guinda” en todas las celebraciones familiares. Hasta el último momento, con 91 años, en la boda de Pepe en Palencia nos dejó a todos “boquiabiertos” con una homilía modélica e impecable en el fondo y en la forma. Si tuviera que destacar uno de sus discursos iría a la catedral de León en la boda de Beatriz. Es verdad que allí estaban escuchando sus dos amores: Cuba y su familia. La misa la había dicho Amado. Él sólo habló tres minutos al final. ¡Insuperable!. Con aquel “for ever” a los novios llenaba de sonido los muros de la catedral. El último día que yo vi a tío Amando ante un micrófono fue en Mayorga. Al final de la misa, el coro de las monjas inició “la salve”. No sé de donde sacó la fuerza para tapar con su voz al público y al coro. Se veía a tío Amando emocionado y fuera de sí. Matilde me comentó “es la despedida de tío Amando”, y acertó.

· Vino con Lázaro a verme al Instituto. Allí nos encontramos a un profesor, compañero, en silla de ruedas, paralítico. Tío Amando me comentó: “Sólo le pido a Dios que me lleve antes de verme así”. Y Dios se lo concedió, morir en plena actividad, con la mente lúcida y sin dar “la lata” a nadie. Este es un motivo más de alegría. Estos días yo he visto en la familia sentimientos contrarios: tristeza porque se nos ha ido nuestro buque insignia familiar y alegría porque sabemos que tío amando ha vuelto con sus padres, con tío Segundo, con nuestros padres, … a la casa de Dios.

Secundino Llorente.
VILLAFALÉ. León

sábado, 1 de mayo de 2010

"Amando conseguía que el corazón de cada hombre alcanzara todo su esplendor en Dios"


De nuevo Tío Amando volvió a reunir a toda la familia Llorente y amigos del pueblo de Mansilla Mayor en torno al Sagrario, como él siempre deseaba.
El P. Pablo S.J., ofició la misa en su recuerdo en compañía de once sacerdotes, alguno de ellos alumno de él, en el colegio de Carrión de los Condes. Fue precisamente en este templo en el que recibió el bautismo y donde, de la mano de su madre, comenzó a forjar su fe en Dios. "Segundo fue un gran místico, .... pero por su parte, Amando conseguía que el corazón de cada hombre alcanzara todo su esplendor en Dios" señaló el P. Pablo en la homilía, quien conoció personalmente a los dos hermanos.

La eucaristía finalizó de forma emotiva cantando la Salve que tanto le gustaba a Tío Amando y que él convirtió en verdadero himno familiar. Ya al caer la tarde nos dirigimos a la casa solariega de la familia y aquí, presididos por una foto de su juventud seguimos compartiendo inolvidables momentos que vivimos en su compañía.

Agradecemos a quienes desde todo el mundo habeis compartido con nosotros en este blog o por correo electrónico vivencias con Tío Amando. Invitamos y animamos a todos los que visitais el mismo a que sigais incluyendo comentarios.

viernes, 30 de abril de 2010

Misa en recuerdo de Tío Amando en su localidad natal



El sábado día 1 de mayo tendrá lugar una Misa en recuerdo de Tío Amando organizada por la familia en su localidad natal, Mansilla Mayor. En esta misa se leerá la siguiente carta de despedida:

Nuestro Querido Tío Amando:

Pensando en estas palabras de despedida sólo me venían imágenes bonitas y alegres de ti. Paseando con tu sombrero entre las vacas de Liborio, hablando con Tío Joaco de las aluches, riéndote con Tía Montse y Tía Gelina, visitando a Tío David en Mayorga , te imagino abrazándote con Tío Segundo con una enorme sonrisa lleno de pieles en Alaska. Te veo en tu sencilla y llena de Dios capilla en la A-C.U. en Miami, mirando al mar al lado de Tu Pescador de Hombres y pensando en tu Catedral de León. Y veo, cómo realmente has sido pescador de Almas y has creado una Catedral de Fe y Amor allí por donde has pasado. Darte Gracias por dar tu vida por los demás, por entregar tu vida siempre con tu alegría, por tu servicio, tus consejos, tu sacerdocio y tu labor misionera. Labor que no dejabas ni en tus vacaciones en España con la familia. Siempre venias con alguna tarea. Querías saber de todos nosotros, hablabas con todos los que te necesitamos y fuiste nuestro consuelo y ayuda. Nos diste paz cuando mas la queríamos y sólo nos pedías que nunca nos alejáramos de Dios. Esta es la herencia que nos deja a la familia. Que SIEMPRE sigamos SUS pasos y seamos ejemplo de EL. Él que ha sido y es un orgullo como sacerdote. Él que pasara como una eminencia (el lunes tendrá un funeral apoteósico y merecido). Para nosotros tan sencillo y a la vez tan Grande. Nuestro Tío Amando. Al que hoy queremos dar gracias y apreciar la riqueza que él significó para nosotros. El creía firmemente que la Vida es mucho más que esta vida. Jesús nos dice "No se turbe vuestro corazón ", "creed en Mi". Todos tenemos un lugar preparado en el Cielo con Dios misericordioso pero, el que sin duda lo tiene triunfante, recibiéndole su hermano mayor Segundo es Tío Amando. Desde nuestra pequeñez pero alto te decimos:

GRACIAS SIEMPRE TÍO AMANDO


Por su parte, desde la A.C.U. en Miami tiene previstos una serie de actos de despedida hasta el lunes, día en que tendrá lugar el entierro, los cuales se pueden ver en el siguiente enlace:

miércoles, 28 de abril de 2010

"¡Hay quien luche! "



Dios le premió con la muerte que él quería ... "con las botas puestas en su Agrupación querida". Desde su León natal, la familia Llorente se une en la tristeza y el pésame a su también familia de la Agrupación Católica Universitaria.


Aprovechamos especialmente para agradeceros a todos aquellos que estuvísteis junto a él en su larga vida, especialmente aquellos que le acompañaron en sus últimos años.

¡Hay quien luche! Estará diciendo desde el Cielo. ¡Qué gozoso el deseado reencuentro con sus padres, con sus hermanos y con sus amigos, también hermanos del alma! Pero, sobre todo, contemplando el Rostro del Señor a Quien dedicó su vida plenamente. Esa es su recompensa más grande a la lucha y al trabajo de toda su vida.

Te echaremos de menos Tío Amando, aunque estamos seguros de que seguirás cuidando de todos nosotros desde Arriba ... "siempre en la trinchera"


Familia Llorente.
León. España